Nuestras vacaciones de Semana Santa empezaron con la idea de ser tranquilas, y terminaron convirtiéndose en una gran aventura para toda la familia! En la edición pasada de junio de la revista de la aerolínea TAR, Star News les compartí nuestra historia, y ahora lo hago por aquí por si no la vieron, esperando que sus próximas vacaciones familiares también resulten grandes aventuras que se conviertan en lindas memorias para todos.
Haz de tus próximas vacaciones familiares una gran aventura
Patty Becerril
La vida nos ha enseñado —probablemente en varias ocasiones— que las cosas no siempre salen como las planeamos y, en algunos casos, terminan saliendo mucho mejor de lo que esperábamos originalmente.
Esto fue lo que nos sucedió a mi familia y a mí durante la pasada Semana Santa. Habíamos pensado ir al Gran Cañón. Empecé a buscar hoteles y por indecisos, se pasó el tiempo y cuando por fin elegimos uno que nos gustó, resultó que ya no habían cuartos disponibles.
Entré en pánico y empecé a buscar en sitios de hospedaje alternativos, para ver si rentábamos alguna casita. Viendo las distintas opciones, encontré una carpa. Sí, una casa de campaña; me encantó la idea de acampar. Y las sorpresas continuaron. Resultó que el campamento se encontraba a las afueras de Williams, un pueblito de Arizona, de donde sale un tren que te lleva al Gran Cañón.
La idea original de unas vacaciones familiares en un hotel convencional, llegando al Gran Cañón en carro, terminó convirtiéndose en una gran aventura donde nuestra pequeña de 5 años supo lo que era dormir bajo las estrellas y viajó por primera vez en tren, culminando la aventura ante la imponente belleza de una de las maravillas naturales del mundo.
Lo que me dejó esta experiencia fue la pregunta: ¿Por qué organizar vacaciones, cuando podemos planear grandes aventuras? Así como existe la opción de rentar carpas, existen también otras alternativas de hospedaje súper divertidas como casas en árboles, chocitas a la orilla del mar, o hasta barriles en el Valle de Guadalupe.
Quizás acampar o quedarse en lugares al exterior no sea del todo cómodo, sin embargo no se trata de ir a sufrir. Por suerte hay algunas cosas que pueden ayudarnos a hacer la experiencia lo más cómoda posible, como colocar un colchón inflable bajo la bolsa de dormir. Si no tienes, los flotadores largos para las albercas son una práctica opción, así como los pisos de foami para niños.
No olvidemos el repelente para insectos, cerillos, bombones y salchichas para asar, un kit de primeros auxilios, linternas y batería extra para el celular, ya que no tendrás dónde cargarlo y seguramente lo necesitarás para tomar fotos.
Recuerda también revisar cómo estará el clima, para así estar preparado en caso de que haga mucho frío, calor o lluvia. Habrá cosas que de plano tendrás que aguantar, como la falta de baños con drenaje, pero ten en cuenta que son muchos los beneficios que reciben los niños al estar en contacto directo con la naturaleza.
Planear aventuras definitivamente los unirá como familia y los pequeños atesorarán esos divertidos recuerdos vividos junto a sus seres queridos.