
Navidad siempre ha sido mi época favorita del año, pero desde que soy mamá me disfruto esta época aun más, al ver la cara de emoción de la pequeña cuando vamos a un centro comercial y me dice ¡wow! paradita frente al gran árbol de navidad, o cuando comienza a bailar adorablemente al oír la música navideña, y aunque todavía no entiende bien el concepto de Santa, se que gozara la mañana de navidad abriendo los regalos.
Aquí les comparto mi top 10 de motivos por los cuales me gusta aun más navidad desde que me convertí en mamá:
1.- Puedo compartir con mi personita favorita la alegría del verdadero significado de navidad: Entre tantos Santas, muñecos de nieve, renos y regalos, llegamos a distraernos un poco del verdadero significado de navidad, ¡festejar el cumpleaños del Niñito Jesús! Me ha costado encontrar un libro ilustrado con la historia del nacimiento, pero sigo la búsqueda para leerlo con la pequeña. También me gustaría que tenga la costumbre de incluir al niñito Jesús como el #1 de su lista de regalos, aquí puedes bajar una hoja para imprimir, draw_your_own donde los chiquitos pueden dibujar dentro de tres cajas de regalos, lo que quisieran regalarle al Niñito Jesús.

2.- Al comprender la verdadera importancia de esta fecha, la víspera se hace más emocionante. Recuerdo cuando era chiquita mi mamá había bordado un calendario, donde cada día sacaba un adornito que prendía de un pinito; cada mañana en cuanto abría el ojo salía corriendo a colocarlo, entre más se acercaba la fecha era más emocionante.
Ahora también hay un libro increíble “24 días antes de Navidad” un cuento/diario para niños que los motiva a portarse bien. Los ayuda a reflexionar y hacer un examen de consciencia por medio de preguntas, y les propone hacer pequeños cambios para tener una mejora diaria. También promueve la lectura, la escritura, el pensamiento reflexivo y los valores como amor, respeto, disciplina, generosidad, alegría, entre otros. Si te interesa puedes conseguirlo aquí.

3.- Volver a ver las caricaturas clásicas de navidad: Pero ahora abrazada de mi pequeña. Todas unas clásicas que no pasan de moda, de verdad que recordar es volver a vivir y en este caso, volver a ser niña.

4.- Ser ayudante de Santa: ¿Quiénes mejor que los papás (que son los que conocen más a sus pequeños) para ayudar a santa?! Por eso me encanta buscar el juguete que más disfrutará (porque todavía está muy chiquita para pedirlo ella) y para ayudar a Santa un poco más, le facilito la entrega de los regalos con un costal personalizado (así no se confunde de niño) y ¡le ahorramos el tiempo de la envoltura!

5.- Decorar la casa: para mí el entretenimiento empieza desde hacer las decoraciones, en “Una dulce navidad, adornos inspirados en la pequeña” les comparto como hacer unas paletas con limpia pipas para colgar en el árbol.
6.- ¡Visitamos a Santa para tomarnos fotos con él! El año pasado empezamos esta tradición familiar que espero continuemos para ir viendo el crecimiento de la pequeña cada año en la misma fecha. El año pasado se dejo cargar feliz por Santa, pero este año de plano dijo ¿y este señor barbón que me quiere cargar quién es? y no dejo de llorar, pero como a Santa no le gusta ver a los niños tristes, muy simpáticamente se escondió detrás de nosotros, y cuando la pequeña dejo de llorar, la fotógrafa le indico que podía salir, tomo la foto y volvió a esconderse sin que la pequeña se percatara de su presencia y todos felices, la mamá por tener la foto y la pequeña porque no volvió el señor de la risa asustosa.
Fueron tan pacientes y amables que con mucho gusto les recomiendo aquí el estudio, además de que me gusto mucho el set.

7.- Ir a buscar los regalos, quizás el ir a los centros comerciales llenos de gente, el caótico tráfico decembrino para llegar allá y el pensar en que les gustaría a cada quien sea un poco complicado, pero cuando por fin encuentras el regalo perfecto, todo aquello valió la pena. No es solo el regalo lo que cuenta, sino el tiempo y esfuerzo que invierte la persona que lo da, algo que debemos de considerar esta navidad cuando recibamos algún regalo.
8.- ¡Hacer galletas! Es una actividad divertida que puedes hacer con niños. La pequeña disfruta estar sentada conmigo en la cocina, y se siente feliz cuando la dejo participar echando algunos ingredientes al tazón. Si piensas hacer galletas te SUPER recomiendo esta receta de galletas de azúcar que te dejo al final del post, están DELICIOSAS.
9.- ¡Comer las galletas! y el pavo y el jamón al horno, y el pan de frutas y ¡bueno! Todas las delicias tradicionales de estos días.
10.- ¡Reunirnos con la familia!: Definitivamente, entre tantas cosas lindas, la MAS linda es poder compartir todo esto con nuestra familia.
Galletas de azúcar glaseadas:
- 2 ½ tazas de harina
- 1 cucharadita de polvo para hornear
- ¼ de cucharadita de sal
- 2 barras de mantequilla (sin sal) a temperatura ambiente
- ¾ de taza azúcar granulada
- 1 huevo grande
- 1 cucharadita extracto de vainilla
- 2 cucharadas de merengue en polvo
- Chispitas para decorar (opcional)
1.- Cernir la harina, polvo de hornear y sal a un tazón mediano.
2.- Bata la azúcar granulada en un tazón grande en velocidad media- alta hasta que este liguero y bien incorporado, de 3 a 5 minutos. Agregue el huevo y la vainilla y bata hasta bien incorporado. Baje la velocidad de la batidora a bajo; agregue la mezcla cernida de harina poco a poco y mescle solo hasta que se incorpore. Divida la masa en dos, envuelva en plástico y refrigere hasta que este firme, mínimo 1 hora y máximo 1 día.
3.- Prepare 2 charolas para hornear engrasándolas. Trabajaremos con una bola de masa a la vez, ligueramente enharine la masa y con el rodillo extiéndala en medio de dos pedazos de papel encerado hasta que este de 1/8 de grueso. Refrigere hasta que este ligueramente firme, unos 15 minutos. Corte formas con los corta galletas (hay con muchas formas navideñas como pinos etc) y colóquelo en las charolas para hornear. Junte las sobras de recorte y vuelva a enfriar hasta firme y repita para cortar mas galletas.
4.- Precaliente el horno a 350° y hornee las galletas hasta que empiecen a dorarse un poco, de 13 a 15 minutos. Deje enfriar 5 minutos en las charolas, sacarlas y dejar enfriar completamente.
5.- Para el glaseado, cernir la azúcar glass y el merengue en polvo en un tazón grande, mezcle 6 cucharadas de agua con la batidora en velocidad media hasta que este suavecito. Unte las galletas con el glaseado y decore con las chispas, deje reposar como una hora.
¡Que las disfrutes! y también todo esta caótica y emocionante víspera navideña.